En Progresa +, sabemos que enfrentarse a una entrevista de trabajo puede generar nervios e incertidumbre, especialmente si llevas tiempo fuera del mercado laboral o formas parte de colectivos vulnerables que enfrentan barreras adicionales para acceder a un empleo. Por eso, queremos compartir algunos consejos clave para ayudarte a destacar y superar con éxito este importante paso hacia tu inserción laboral.
1. Prepara la entrevista con antelación
Investiga sobre la empresa y el puesto al que postulas. Conocerla te permitirá mostrar interés y alinearte con lo que buscan en un candidato/a. Además, revisa bien los requisitos del empleo y piensa en ejemplos concretos de cómo tus habilidades y experiencia se ajustan a ellos.
2. Practica tus respuestas
Ensaya respuestas para preguntas comunes como:
- «¿Por qué te interesa este puesto?»
- «¿Cuáles son tus fortalezas y debilidades?»
- «Háblanos de una situación en la que resolviste un problema en el trabajo.»
Utiliza la técnica STAR (Situación, Tarea, Acción, Resultado) para estructurar tus respuestas y asegurarte de que sean claras y concisas.
3. Cuida tu lenguaje corporal
Tu comunicación no verbal puede ser tan importante como tus palabras. Mantén contacto visual, sonríe de forma natural y adopta una postura erguida pero relajada. Estas señales transmitirán confianza y profesionalismo.
4. Escoge un atuendo adecuado
Investiga el código de vestimenta de la empresa y elige un atuendo que sea apropiado para el ambiente laboral. Si tienes dudas, opta por un estilo más formal que refleje seriedad y respeto por la oportunidad.
5. Haz preguntas acertadas
Al final de la entrevista, suele haber un espacio para realizar preguntas. Aprovecha este momento para demostrar tu interés, formulando preguntas como:
- «¿Cómo se mide el éxito en este puesto?»
- «¿Qué oportunidades de desarrollo profesional ofrece la empresa?»
Evita preguntas sobre salario o beneficios hasta que se te haga una oferta.
6. Sé honesto/a y auténtico/a
Es importante que muestres quién eres realmente. Habla con confianza sobre tus logros, pero también reconoce áreas de mejora con humildad. Los empleadores valoran la autenticidad y el compromiso por aprender y crecer.